Secuestros Telefónicos
Por: Salvador Romero Espinosa (@chavaromero) Imagina que suena tu teléfono y aparece en la pantalla la fotografía de tu pareja y ese nombre peculiar y -normalmente- cursi, con el cual decidiste guardar su contacto, por ejemplo, “Amorcito Corazón”, por lo que contestas seguro de que te está llamando desde su teléfono. Imagina entonces que escuchas la voz de tu pareja sumamente agitada y nerviosa, asegurándote que acaba de ser secuestrada y, acto seguido, escuchas otra voz, masculina, con tono serio y violento, indicándote que la tienen secuestrada y que es indispensable que les transfieras a su cuenta muchos miles de pesos en menos de una hora, si quieres volverla a ver con vida y además que, si cuelgas la llamada, inmediatamente la matarían. ¿Qué harías? ¿Qué pensarías? Supongamos que decides no correr riesgos y hacer la transferencia que te piden, por lo que corres hacia tu computadora suplicando al secuestrador que no le vayan a hacer daño y, con tus manos temblándote, das de a...